PARTE 2 (AL SUR LOS BOLETOS)

Nelson Rockefeller, director de la Secretaría de Asuntos Internacionales (OCIAA), fue la encargada de elaborar y desarrollar proyectos de aproximación cultural entre los Estados Unidos y la América Latina.Como era de esperarse, el pensamiento fascista proveniente de Europa comenzó a minar los vínculos yankees que ésta tenía con la América morena.Dentro de este proyecto, antes de la aproximación de Disney a Sudamérica, estuvieron actores y actrices en América del Sur como Tyron Power, Lana Turner, además de los directores John Ford y Orson Welles propagando y propiciando el refuerzo cultural americano.

En el momento en que la oficina de Rockefeller se contacta con Disney, éste estaba atravesando una feroz huelga en su Estudio por mejoras laborales.Los animadores de Disney llegaron a ser un blanco importante para los activistas sindicales de Hollywood.Originalmente, Walt y Roy (quiénes se habían asociados para la primaria Disney Brothers en la década del 20) habían configurado una empresa familiar, donde un grupo de amigos se reunían para fabricar cortos animados.Luego del gran estreno en 1937 del primer largometraje animado “Blanca Nieves y los 7 enanitos” de los hermanos Grimm, los dividendos y utilidades que les produjeron dicha película al Estudio fueron tales que permitieron la construcción de sendos edificios en Burbank para el ensanchamiento de la factoría Disney albergando , en dicho período, alrededor de 1500 trabajadores.

En otras palabras, luego del estreno del largometraje animado, el Estudio tuvo un meteórico ascenso.De los 7 empleados en la empresa original que fundó Walt a mediados de la década del 20 (Laugh-O-Grams) a la fecha en que se provocó la gira a Latinoaméricana a comienzos de los 40 se había aumento a casi un mil por ciento su fuerza de mano bruta con cerca de 1.500 empleados que contenía ahora el Estudio.Gente que, a esas alturas del partido, ni Walt Disney conocía.Lo que en un principio fue concebido como una pequeña empresa familiar (la Disney Brothers), Walt ejercía en sus trabajadores una especie de paternalismo vincular (el mismo hecho de aventar a los dibujantes a sus casas en su coche después de la jornada laboral).Para dicho crecimiento a fines de los 30, muchos trabajadores veían en el sindicato la única vía de protección en el asalariado.El paternalismo ó la función de compañerismo puro dentro del Estudio fue excluído por los nuevos elementos que aumentaron el grupo de producción del trabajo.Adicional a este hecho, estaba el asunto del no reconocimiento de los nombres de los animadores y créditos respectivos en los cortos animados como política de la Empresa Disney.Lo anterior alentó a los que estaban por reformas laborales, incentivar la paralización como única medida de presión.El principal promotor de esto fue Herb Sorrell.En el amanecer del 29 de mayo de 1941, 40% de los trabajadores del Estudio se plegaron a la paralización.

“NO HAY HILOS SOBRE MI” – con un cartel de Pinocho- 40% de los trabajadores del Estudio Disney se plegaron a la paralización en mayo de 1941.

Esto llevó el transtorno de Walt Disney ante tales hechos, quién vio en la propuesta de Rockefeller un salvoconducto para cambiar de aires y esperar que las cosas se enfriaran.Durante julio, a priori de la partida hacia Sudamérica, como una medida por la ausencia de Walt durante 8 semanas, los Estudios fueron intermediados por personas externas y neutrales para llegar, lo más pronto posible, a una solución para la huelga.

El trato con Rockefeller consistía en que el gobierno americano subsidiaría una serie de cortos que fabricaría Disney en pro de la buena vecindad e intercambio cultural.Esto conllevaría 4 películas independientes que se estrenarían casi simultáneamente en los países escogidos : Brasil, Perú, Argentina y Chile con personajes alusivos ó adaptaciones de los carácteres ó personajes más reconocidos de la factoría Disney.

CONTINUA EN PARTE 3